Páginas

viernes, 10 de noviembre de 2017

Dimensión ética del ser humano


LA FILOSOFIA DE SÓCRATES
                                          Por Jesús  Pérez Loza
          En el siglo V antes de Jesucristo, conocido en Grecia como el Siglo de Oro, vivió Sócrates (469-399), quien cambió el rumbo de la reflexión filosófica dedicada al conocimiento del mundo físico, para centrarla en el hombre, dando un giro antagónico: de la preocupación cosmológica a la meditación antropológica.
Sócrates, dialoga con sus alumnos. Pintura de Jacques Louis David.
             El afán del hombre por conocerse a sí mismo, es la tarea principal de la filosofía para Sócrates, quien en este empeño enseña a la juventud ateniense a pensar, a filosofar y a buscar el bien o la virtud, porque considera que la virtud es un saber que capacita para la vivir.
          La búsqueda de la verdad y del bien la realiza a través de su método, que denominó mayéutica o alumbramiento de  la mente con las ideas que dan acceso al conocimiento.

Atenas en el siglo V antes de Jesucristo
         Sócrates adoptó este método, imitando en el campo intelectual el nacimiento que se da en la vida natural, al observar el trabajo ginecológico de su mamá, Fainarete, quien era partera. Su papá, Sofronisco, era cantero o escultor. Por ello, dijo que en su actividad docente aplicaría esos conocimientos. En la mente de los jóvenes daría a luz nuevas ideas y en lugar de formar estatuas, formaría ciudadanos de bien, hombres honestos.        En esta actividad, Sócrates descubrió la definición o concepto y la filosofía moral o ética.
Protágoras

         Entre los personajes que han trascendido en la historia de la humanidad, Sócrates es de los poco que no escribieron un libro. Su filosofía quedó impresa en la mente de sus discípulos y seguidores. Su vida y su filosofía, se conocen principalmente por los Diálogos y escritos de su discípulos Platón y Jenofonte.
           
La humildad de Sócrates aún ante el conocimiento, queda demostrada en su expresión: "Yo, sólo se una cosa, que no se nada".

            La virtud es igual que el conocimiento. Entre más sabio eres más virtuoso.
         El hombre no hace el mal voluntariamente, más bien lo realiza por ignorancia.
            Si cae en el vicio, también lo hace por ignorancia
          Por su estilo claro y paciente de enseñar, se le considera el gran maestro de todos los tiempos, inclusive sus clases eran en la plaza y en la vía pública, buscando llegar a la verdad. Esta actitud de Sócrates, contrasta con sus contemporáneos los sofistas, principalmente Protágoras (480-410)  y Gorgias (487-380), quienes también ejercían la docencia, pero atendían a los estudiantes con  recursos económicos y cobraban por sus enseñanzas. Lo que en su época causó un gran escándalo, no obstante que fueron unos grandes impulsores de la educación, pero más que buscar la verdad, su propósito era capacitar a sus alumnos para acceder a la política o los cargos públicos.
Gorgias


          De todas formas los sofistas o sabios, que eran maestros ambulantes, hicieron importantes aportaciones al conocimiento.
           Protágoras, es el autor de la homomensura, al afirmar que el hombre es la medida de todas las cosas. También sostiene el relativismo epistemológico, porque asegura que no hay nada verdadero en absoluto.
           Igual, tampoco hay nada bueno en absoluto: subjetivismo ético.
           Gorgias es autor de la triple negación: 1. Nada existe. 2. Si algo existiera sería incognoscible. 3. Dado que existiera algo y llegáramos a conocerlo, no podríamos comunicarlo a los demás.
            Niega así: la realidad, el conocimiento y el lenguaje.

            A Sócrates, le siguieron su principal alumno Platón y el alumno de éste Aristóteles, así como otros simpatizantes agrupados en escuelas posteriores como la de Megara, la Cirenaica y la Cínica.
            Su pensamiento honesto y su mensaje de permanente búsqueda del bien, han sido la mejor herencia que el maestro ha legado a la humanidad. 

Mapa de Grecia
          Sócrates murió al beber la cicuta, un veneno fulminante, porque así fue sentenciado, al ser calumniado y juzgado por los hombres perversos y políticos de su época, que no le perdonaron su buena fama, su sabiduría, su ética, así como  la admiración y respeto que le profesó la juventud ateniense; inclusive, sus alumnos le propusieron huir antes de que cumpliera su castigo, pero él se negó a ello y eligió actuar con verdadera ética, acatando la ley aún a costa de su vida.


    




Guadalajara, Jalisco, México, 10 de noviembre de 2017.

No hay comentarios:

Publicar un comentario